Como hemos demostrado más arriba, las opciones de la manipulación del sonido son infinitas. Podemos hacer con los números “lo que deseemos”, cualquier operación matemática y por lo tanto obtener un sinfín de posibilidades para la manipulación del sonido.

Resulta muy emocionante, estimulante y divertido comprobar cómo las operaciones matemáticas se traducen en sonido manipulado. Todo ello utilizando la tecnología, mostrando cómo las matemáticas, el sonido, la física, la informática, la programación y sobre todo la creatividad se integran para formar un caleidoscopio maravilloso.